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Reconocimiento a graduados

18 de junio de 2015, 18.45
El pasado 16 de junio, en las instalaciones del Salón "Ing. Humberto Ciancaglini" de la sede de Av. Paseo Colón 850, se celebró una nueva edición del Día del Ingeniero, con motivo de homenajear a los profesionales de la Facultad de Ingeniería de la UBA que culminar...

El pasado 16 de junio, en las instalaciones del Salón "Ing. Humberto Ciancaglini" de la sede de Av. Paseo Colón 850, se celebró una nueva edición del Día del Ingeniero, con motivo de homenajear a los profesionales de la Facultad de Ingeniería de la UBA que culminaron sus estudios en 2005.

El emotivo encuentro contó con la participación del decano Prof. Ing. Horacio Salgado; el subsecretario de Relación con Graduados, Ing. Ariel Alegre, el subsecretario de Intercambios Académicos Ing. Miguel Ponce; docentes, personal no docente, alumnos y familiares de los homenajeados.

"Han abrazado una profesión que yo considero maravillosa. Y estoy profundamente convencido que ustedes también. Todos seguramente deben estar pasando por una situación exitosa a nivel profesional, ya que tratándose de la UBA, nuestros graduados siempre vuelven diciendo que les está yendo bárbaro en su profesión", señaló el decano Salgado, para quien los graduados son "la polea de transmisión entre la academia y la profesión", de ahí que "su participación, más allá del tiempo que le puedan aportar a la facultad, es fundamental para que la comunidad sepa qué sucede en la Universidad de Buenos Aires". 

El titular de la FIUBA invitó a los homenajeados a colaborar en su gestión. "Es importante que sean partícipes de los acontecimientos que ocurren permanentemente en nuestra facultad. Son ustedes en tanto graduados quienes tienen que decirnos qué necesita el mercado laboral de la ingeniería en los tiempos que corren, o bien ocupar los cargos de dirigentes, consejeros y decanos el día de mañana. Deben formar parte del recambio en las instituciones", dijo Salgado.

Otro de los oradores fue el Ing. Industrial Daniel Dreizzen, en representación de los graduados, quien expresó su orgullo por la educación pública de la Argentina e hizo énfasis en el rol que deben asumir los ingenieros para mejorar la calidad de vida de la comunidad. "Es misión de todos, pero en particular de los ingenieros, ayudar al desarrollo de nuestro país. Debemos aprovechar el evidente potencial que tiene la Argentina, que está en nuestras manos, pues con nuestras herramientas y honestidad y ética social podemos ayudar, ya sea desde la facultad o desde nuestra profesión", destacó.

En el cierre del encuentro, la Inga. Industrial Tamara Szaingurten –tras recibir el diploma que rinde homenaje a sus 10 años en la profesión– remarcó su satisfacción por ser egresada de la FIUBA y manifestó que "con el tiempo uno confirma que lo que verdaderamente se disfruta es lo que se lleva a cabo con esfuerzo. Pero no hay que olvidarse que la sociedad no nos pidió nada a cambio por el privilegio que tuvimos de estudiar en esta casa. Por ello, debemos asumir el compromiso de devolver a la facultad y a la sociedad todo lo que nos brindó", concluyó.